

Algunas veces vivo y otras veces la vida se me va con lo que escribo; algunas veces busco un adjetivo inspirado y posesivo que te arañe el corazón; luego arrojo mi mensaje, se lo lleva de equipaje una botella, al mar de tu incomprensión. No quiero hacerte chantaje, sólo quiero regalarte una canción.
No hay comentarios:
Publicar un comentario